Créeme, si hay algo que me encanta más que una taza de té verde en la mañana, son los beneficios transformadores del Zen. Y no, no estoy exagerando. Incorporar prácticas Zen en tu vida cotidiana es como darle un masaje relajante a tu cerebro, mientras te conviertes en esa persona que siempre parece tener todo bajo control (aunque en realidad, solo estamos respirando profundamente).
¿Buscas reducir el estrés, mejorar tu bienestar o simplemente descubrir de qué va esta filosofía? Pues aquí te dejo algunas preguntas frecuentes, para que no tengas que fingir que ya lo sabías todo en la próxima conversación sobre mindfulness.
Y si alguna pregunta se te quedó en el tintero o necesitas que aclare algo (sí, a veces también me pierdo en mis propias respuestas), no dudes en contactarme. Estoy aquí para acompañarte en este viaje hacia una vida más equilibrada, consciente… y con menos quejas sobre el tráfico.
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